Era el día de la boda de Sofía, pero no se sentía feliz. ¿Cómo podría estarlo si no se iba a casar con Godfrey, el hombre a quien amaba, el padre del hijo que llevaba dentro, sino con su hermano mayor?
Jonathan era apuesto y agresivo y cumpliría la promesa que le hizo a su hermano en su lecho de muerte: casarse con Sofía y reconocer a su hijo. Jonathan le había asegurado a Sofía que aquel era sólo un matrimonio de conveniencia, pero algo la hacía sentir que él necesitaba una verdadera esposa...
No hay comentarios:
Publicar un comentario